"Nuestro Palacio de Justicia, en el que se dirimen los pleitos por divorcio, en una gigantesca procesión de desavenencias y trastornos matrimoniales". Reportaje: "Sobre el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil caen verdaderas oleadas de papel sellado en el cual hombres y mujeres desnunda, sin recato alguno, sus intimidades conyugales, clamando por el divorcio, que consideran como el único tónico para rehacer sus ilusiones y todas sus esperanzas. El año o se presentaron mil cuatrocientos setenta y cuatro demandas por desavenencias y trastornos matrimoniales, y, actualmente, hay en curso más de mil peticiones de divorcio - ¿Quiénes van a la vanguardia de este campeonato de desilusiones? - Un tanto por ciento crecido corre a cargo de la llamada clase media y de los burócratas, pero los campeones, los que han batido el 'record' en esta prueba son ... !los comerciantes!, que forman legión como enemigos de la tradicional epístola de San Pablo". La Esfera, Caracas, 08/06/1941.
Reportaje, por cierto, muy bien redactado, alarmado ante el índice de divorcios de entonces. La vieja sede de los tribunales, hoy de la alcaldía menor de Caracas. Nos preguntamos cuáles de los cinco o seis peatones se enteraron de la gráfica divulgada por La Esfera. ¿No es una manera de trascender? ¿Quién podrá hacer de "policía hemerográfico" para indentificarlos? ¿Algún heredero ya lejano se adivinará como tal respecto al ciudadano alguacil? Por lo demás, sumados los del tranvía, un enjambre de cables explicaba el techo de la ciudad capital que sorprendería al visitante del país predominantemente rural que fuímos? Además, ¿lo fimos, pues no está en marcha un proceso de ruralización de nuestras ciudades?
LB
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