ALQUÍMICAMENTE, DE SUYO

EL NACIONAL - Sábado 14 de Abril de 2012 Cultura/3
EXPOSICIÓN Ofrendas y rosetas reúne 27 collages
Anabela San Vicente transforma el papel en metal
La artista presenta su segunda individual, en la que reinterpreta un motivo religioso a partir del uso de material reciclado
C. V. M.

La alquimia de Anabela San Vicente transforma el papel en metal. La artista toma íconos religiosos, como son las rosetas de las iglesias, y los transforma en obras en las que el papel, los óxidos y la madera asumen una nueva naturaleza.

Los 27 collages que la creadora exhibirá a partir de mañana en el Gabinete del Dibujo y de la Estampa de Valencia están hechos de papel y materiales reciclados, pero aun así logra que las piezas tengan una apariencia más sólida, como de aluminio. Se trata de una reinterpretación de una técnica que nació a principios del siglo XX, con la vanguardia Dadá, que ha sido adaptada a otro momento y contexto.

"La artista tiene un particular proceso creativo que parte de la idea del reciclaje, la recolección de metales y el rescate del potencial estético de estos. San Vicente superpone y compone un todo unificado de diversos materiales", indica Bélgica Rodríguez, comisaria de la muestra, en el texto curatorial.

Ofrendas y rosetas en collages es la segunda individual de San Vicente, quien el año pasado expuso sus obras en la galería Gsiete del Centro de Arte Los Galpones. "Fui al Gabinete del Dibujo y de la Estampa en septiembre, cuando se inauguró la exposición de Rubén Núñez. Llevé mis catálogos y la directora de la institución, Lisette Álvarez, los vio y me dijo que mi trabajo iba con la filosofía de la sala, por ser obra de papel. Me dijo: `Quiero que expongas el próximo año’, y ¡aquí estoy!", expresa la artista.

El título de la muestra lo ideó la curadora, inspirada en la temática de las rosetas. "Son como las de las iglesias, muy parecidas, pero están hechas a base de papel y aluminio. La parte metálica y de madera consiste en unas planchas que hago con los metales oxidados.

No es que lo copio un patrón, sino que lo reinterpreto con pintura y óxido sobre papel", señala la creadora.

La propuesta de San Vicente tiene que ver con reciclaje y critica el consumismo. A través del collage, transforma materiales aparentemente insignificantes y les da otro carácter: el de obra de arte. "Esta es la obra de la mujer artista del papel y ahora de metales de latas de aluminio o chapas de botellas encontradas en depósitos anclados en algún sitio a la espera de ser reutilizados, otras exploraciones en el collage con diferentes materiales. Sin embargo, es el mismo gesto extraído de una realidad de arte en configuraciones no sugeridas por el mundo visible; gesto que se manifiesta en abstracciones del pensamiento, en teorías del arte y en conceptos ligados a la naturaleza interior del ser", indica Rodríguez.

Para la artista, la serie de obras en papel y otros materiales es una especie de viaje íntimo, muy personal, que ha emprendido a través de la técnica y los materiales en los últimos tres años. "Durante todo este tiempo he tenido que trabajar mucho con las manos.

En mi obra busco transformar, pero también lograr el equilibrio compositivo, además de la armonía entre las formas geométricas: el círculo y el cuadrado".