EL NACIONAL - Viernes 20 de Septiembre de 2013
El defensor defensor del del lector
0800-SABOTAJE
FRANCK VILORIA- BARAZARTE
El Gobierno bolivariano activó el lunes 16 de septiembre la línea telefónica 0800-sabotaje para que los ciudadanos reporten denuncias de cualquier tipo sobre irregularidades que evidencien. La activación de este centro de información especial es otra de las medidas que adopta el Gobierno bolivariano, según su perspectiva, "para combatir la guerra económica, eléctrica y de desabastecimiento, entre otras áreas, que pretende implementar la derecha para desestabilizar el país".
Esta iniciativa nos plantea una lectura particular del país: 1) Los graves problemas del país no son responsabilidad del Gobierno, sino producto de "la guerra de la oposición".
2) El Gobierno bolivariano no es capaz de asumir su responsabilidad en la crisis del país y busca, no una salida a ésta, sino una salida política. 3) Podríamos pensar que es muy bueno que al gobierno de Maduro se le haya ocurrido crear la línea 0800-sabotaje, como recurso último para descubrir entre los ciudadanos las "marramuncias" del pueblo en general, sobre la premisa de que el Gobierno no funciona porque hay un sabotaje. En consecuencia, este programa debería ser un acierto, si fuese verdad que existe tal sabotaje, ya sea por la población opositora, por seguidores del Gobierno que no están de acuerdo con las políticas desarrolladas por el Presidente o simplemente por la ineficacia y mala gerencia de los directivos de este Gobierno. Las lecturas que uno puede hacer sobre la línea 0800-sabotaje son múltiples.
El Gobierno no ha podido combatir los males que suceden en nuestro territorio, originados por su propia mala gestión, como la inseguridad, la escasez de alimentos y de medicinas, la constante devaluación del signo monetario que nos ha llevado a padecer la inflación más alta del mundo, la falta de repuestos para vehículos e industria, la educación precaria y sin estadísticas oficiales desde 1998, enfermedades endémicas que habían sido erradicadas en el siglo XX y que reaparecen contra todo pronóstico de progreso en este socialismo del siglo XXI. Entonces, ¿por qué no comenzar por reconocer las fallas y fortalecer con planes coherentes la búsqueda de soluciones? Ello sería más progresista.
Pensando como economista, el Gobierno cayó en su propia trampa: ¿cómo hará Maduro para solucionar las enormes dificultades que tiene el país y que abarcan todas las áreas de la vida nacional? Si de verdad al Gobierno le interesara atender los problemas, entendería que estos no se resuelven con la sistematización de la denuncia, sino con políticas públicas sensatas, eficientes y coherentes, al servicio de la ciudadanía y no al servicio del poder... a menos que la línea 0800-sabotaje sea sólo una pantalla para desviar la atención de lo que este Gobierno no ha podido solucionar, en 14 años con Chávez y uno con Maduro.
Aquí me remito al artículo del pasado viernes cuando reseñé brevemente el Foro sobre Neolengua, Polarización y Reconciliación: forma de escritura utilizada por gobiernos dictatoriales para enmascararse y culpar a la democracia por todo lo malo que ellos hacen. Este tema ha estado tomando cuerpo en los medios nacionales con artículos que nos invitan a reflexionar sobre la utilización de la lengua y su relación con el poder. Ejemplo de ello son las declaraciones del lunes pasado de Maduro cuando acusó a la MUD de sacar a testigos de mesa del PSUV a la fuerza, durante las elecciones pasadas. No deja de sorprender que ahora se haga exactamente la misma acusación que denunció la MUD inmediatamente después de las votaciones, y que es parte del documento que sobre la impugnación de las elecciones ha sido presentado en organismos nacionales e internacionales. ¿Cómo asimilar este plagio? ¿Cómo evaluar el discurso y su vinculación con la realidad política que vivimos? Si tenemos este panorama, ¿cómo podremos defendernos de acusaciones cuando utilicen la línea 0800-sabotaje? Hasta el próximo viernes.
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