Dictadura y gentilicio
Luis Barragán
Presuntamente, los cubanos en el exilio estadounidense ya están cansados de la culpa que recae sobre el gentilicio por los tercos afanes de supervivencia de los Castro en el poder y, así, suelen remitir el caso a los propios países que sucumben a sus influencias. Algo parecido pueden decir y dirán los venezolanos en el exterior, al creerse directa y personalmente cuestionados por el influjo negativo de Chávez Frías (y sucesores).
Recientemente, en una entrevista interneteana, el periodista adujo que 100 o 150 mil cubanos constituyen una cifra muy inferior a los millones de venezolanos con los que comparten el mismo suelo, por lo que no deben convertirse en un pretexto para los problemas que nos aquejan. Le respondimos que es cierto, pero también que controlan servicios vitales como los de identificación y extranjería, registros y notarías, entre otros que se sospechan respecto a áreas sensibles en el ámbito de nuestra seguridad y defensa (*), remitiéndonos al régimen que los convirtió en emisarios.
Las dictaduras de orientación marxista, acostumbran a apelar a la nacionalidad para su sobrevivencia. Perfeccionado el aporte de claro cuño estalinista a la escuela, la dictadura se equipara al propio gentilicio.
En nuestro país, desde un primer instante, ha querido confundirse revolución, o dizque revolución, con la propia venezolanidad. Infructuoso esfuerzo que la maquinaria publicitaria y propagandística intenta, aunque debe pasar por el culto a la personalidad del gobernante y si Chávez Frías no pudo convertirse en sinónimo de nuestra identidad, menos lo va a hacer Maduro Moros de inferiores condiciones para un liderazgo político convincente.
Por cierto, grosso modo, Putin ha rendido un formidable tributo a Stalin al promover la grandeza de Rusia y así lo verificamos con motivo de una sesión de la Asamblea Nacional venezolana, a finales del pasado período, con la regocijada presencia del embajador ruso que festejó la victoria soviética de 1945 como antecedente del gobierno que representa, aplaudiendo las intervenciones extravagantemente bolcheviques de los diputados del oficialismo. Y nada puede extrañar que una transición post-comunista, adelantada por las mafias que cimentó, a la postre homenajeen a Fidel como adalid de la nacionalidad, a título de inventario por su ineludible siembra en el imaginario social.
(*)
https://www.youtube.com/watch?v=jMXcURx0s4k
https://www.youtube.com/watch?v=ReHQpt0plas
Fuente: https://www.google.co.ve/search?q=gentilicio+y+dictadura+barragan&ie=utf-8&oe=utf-8&client=firefox-b-ab&gfe_rd=cr&ei=j30uV6TFFoul-wX60ZuoDw
Hubo una vez en la Europa pre-nazi una compilación de opiniones de 100 científicos que se oponían a los descubrimientos de Einstein, en parte porque no creían en las nuevas verdaes científicas, y en parte para desprestigiar a un científico judío.
ResponderEliminarEinstein respondió:: “¡Si yo estuviese equivocado, uno solo habría sido suficiente!”
No es un asunto entonces de cien mil cubanos, porque con uno solo que haya entrado con la intención de dominar sobre Venezuela, ya sería suficiente para rechazar su presencia.
Por ello, Hermann, me pareció tan curioso el gesto defensivo del entrevistador. Un abrazo.
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