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Cariño, me he follado a Bunbury" de Teresa Bellón Sánchez de la Blanca y César F. Calvillo Solana (2016): Por una casualidad, explorando otras posibilidades fílmicas en la red, conseguimos el extraordinario cortometraje, aunque quizá faltó una mayor expresividad de los actores (o de la actriz), y probablemente un golpe de audacia para el juego de cámara, siendo tan explosivo el tópico. Digamos, se trata de un golpe tan contundente, como didáctico, magníficamente resuelto en minutos. Claro, no hubo necesidad de pactar la posibilidad de acostarse cada quien con sus mitos (
https://www.youtube.com/watch?v=Z11eEKja8VU). No sabiamos que Enrique Bunbury existiese (
https://www.youtube.com/watch?v=YbK00KvsNAE).
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Esperando la carroza" de Alejandro Doria (1985): Semanas atrás, también por azar, conseguimos esta magnífica película, todo un tratado de la sociología o de la antropología cultural de los argentinos. No sabíamos de ella, aunque bastaría con verla y citarla para ahorrarnos una extensa bibliografía que suele extraviarse a la hora de lograr una radiografía de la sociedad latinoamericana. Comenzando por la anciana protagonista, representada por un actor de sobrado talento, todo el elenco representa muy bien a la Argentina adentro, desde la intimidad de sus convicciones, lenguaje y expectativas. Por lo menos, así coinciden buena parte de las reseñas vistas. Por estos años, hicieron una segunda parte que, por supuesto, vista en las redes, demasiado caricaturezca, no goza del encanto de la primera. El humor creador, es la clave (
https://www.youtube.com/watch?v=PjzJ7WIOQS8).
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23 Segundos" de Dimitry Rudakov (2014): En los días de Semana Santa, la abandonamos luego del disparo. La retomé muy después, hastiado por no hallar nada, justamente en la escena. E, inevitable, proseguimos. Vericuetos aparte (¿la policía no le aclaró lo sucedido a la víctima, hasta dónde la indiferencia paterna, necesitaba de un consuelo amoroso finalmente?), es un magnífico filme con una protagonista de diestra actuación. Dramática, dramática indiferencia de los transeúntes en el cruce de una carretera que se supone riesgosa, aunque sin los peligros siniestro de una venezolana (
https://www.youtube.com/watch?v=IGIGRBXH9VI).
"Cariño, me he follado a Bunbury" de Teresa Bellón Sánchez de la Blanca y César F. Calvillo Solana (2016): Por una casualidad, explorando otras posibilidades fílmicas en la red, conseguimos el extraordinario cortometraje, aunque quizá faltó una mayor expresividad de los actores (o de la actriz), y probablemente un golpe de audacia para el juego de cámara, siendo tan explosivo el tópico. Digamos, se trata de un golpe tan contundente, como didáctico, magníficamente resuelto en minutos. Claro, no hubo necesidad de pactar la posibilidad de acostarse cada quien con sus mitos (https://www.youtube.com/watch?v=Z11eEKja8VU). No sabiamos que Enrique Bunbury existiese (https://www.youtube.com/watch?v=YbK00KvsNAE).
"Esperando la carroza" de Alejandro Doria (1985): Semanas atrás, también por azar, conseguimos esta magnífica película, todo un tratado de la sociología o de la antropología cultural de los argentinos. No sabíamos de ella, aunque bastaría con verla y citarla para ahorrarnos una extensa bibliografía que suele extraviarse a la hora de lograr una radiografía de la sociedad latinoamericana. Comenzando por la anciana protagonista, representada por un actor de sobrado talento, todo el elenco representa muy bien a la Argentina adentro, desde la intimidad de sus convicciones, lenguaje y expectativas. Por lo menos, así coinciden buena parte de las reseñas vistas. Por estos años, hicieron una segunda parte que, por supuesto, vista en las redes, demasiado caricaturezca, no goza del encanto de la primera. El humor creador, es la clave (https://www.youtube.com/watch?v=PjzJ7WIOQS8).
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