jueves, 1 de mayo de 2014

CONDUCTAS

EL IMPULSO, Barquisimeto, 26 de abril de 2014
Militares y control civil
Juan Páez Avila

En momentos  en que Venezuela se ha instaurado un régimen militar-civil, en el que predomina, desde luego, el poder militar, cuyos representantes ocupan ministerios, viceministerios, presidencias de institutos autónomos y 10 gobernaciones de Estado, y en el que aparece el presidente civil, Nicolás Maduro, ejerciendo limitadas facultades constitucionales, el Dr. en Historia, profesor de la Universidad Bolívar, Hernán Castillo, acaba de publicar un importante libro acerca de las relaciones entre el poder civil y el militar en la década de los años 60, época de golpes de Estado y subversión guerrillera, derrotados por la acción conjunta de Rómulo Betancourt y Rafael Caldera, unidos en el Pacto de Punto Fijo, que también suscribió Jóvito Villalba, pero lo abandonó muy pronto. Si en nuestro país existiera una seria preocupación, no sólo por la teoría militar, sino también por el rol que han jugado los militares a través de la Historia Republicana, este libro debería provocar un gran debate sobre algo que ha sido y es vital en la vida política venezolana, e incluso latinoamericana. Y aunque el período investigado se limita a una década de gobierno democrático, el análisis que Castillo se puede extrapolar a toda nuestra historia republicana, con la seguridad de que los resultados y conclusiones serían más deplorables, sobre todo por la intervención directa de los militares en la política, por la destrucción de la economía en la época de guerras civiles, y la liquidación de las instituciones fundamentales del Estado en períodos de paz aparente, al aplicar a la política la acción vertical y centralista del mundo militar. Para quienes quieran formarse una opinión más fundamentada de quien escribe este libro, es importante destacar que Hernán Castillo es también egresado del Defense Planning and Resource Management Seminar, National Defense University NDU,2000. Washsington, D. C. USA. Master en Seguridad y Defensa Nacional, 1998, Instituto de Altos Estudios de la Defensa Nacional, IAEDEN, Caracas, Venezuela. Egresado del Center Hemisferic for Defense Studies CHDS en cursos sobre Terrorismo y Contrainteligencia. Sólo en la cuatro décadas de gobiernos democráticos, que van del 58 al 98, se puede observar una política militar dirigida a crear una institución armada garante del sistema democrático y defensor de la soberanía nacional. Sin embargo, no obstante que la mayoría de los integrantes de las Fuerzas Armadas Nacionales respetaron y apoyaron el gobierno civil, no se produjo un verdadero y total control del poder militar por el civil, como impera en los países desarrollados y civilizados del mundo de hoy. La cultura libertaria  no forma todavía en  la conciencia de los venezolanos, civiles y militares, un conjunto de valores civilizatorios que  hagan de la relación entre el poder civil y el militar, un hecho de la cotidianidad democrática, aceptado por unos y por otros. Por lo contrario siempre ha existido una conducta conspirativa en importes sectores de la Fuerza Armada, tendente, a utilizar las armas de la nación para asaltar y apoderarse del  gobierno, en la creencia de que ellos son capaces de conducir la administración pública con eficacia, como se conduce un cuartel. Incluso hay civiles que estimulan la conspiración en abierta violación del Estado de Derecho. De la investigación que realiza Hernán Castillo  de las relaciones del poder militar y el civil, se desprende que es necesario un debate sobre el tema, que tenga entre sus prioridades la educación civilista y democrática, no sólo del militar sino también del político civil que ve en la acción inconstitucional de los hombres de armas, un aliado para violar el Estado de Derecho. En una breve reseña sobre un libro de singular importancia para el presente y futuro del  país, hay que destacar la jerarquía que el autor les asigna a los militares desde el punto de vista profesional y constitucional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario