Luis Barragán
El régimen ha empleado todos los medios posibles para doblegar a la Asamblea Nacional, incluyendo el salario de los diputados. Dándole un sentido diferente a la jefatura de la hacienda pública nacional, rayando en la comisión de un delito que convierte en cómplices a sus funcionarios, Maduro Moros estará inventando ahora otras medidas para tratar de torcer la voluntad del único órgano del Poder Público que no le concursa en esta sucursal de la dictadura cubana.
Salario, por lo demás, insuficiente para un oficio encarecido y de tan alto riesgo en el campo opositor, aconsejará la adopción de una distinta fórmula de ejecución presupuestaria que garantice la efectiva independencia del parlamento. Fórmula que parecía innecesaria, porque los funcionarios del Ejecutivo deben cumplir rigurosamente con su deber, demuestra cuán lejos llegan las miserables convicciones presidenciales y cómo entiende una jefatura que es de Estado.
Esa jefatura, como ocurre en materias disímiles como la militar o la política exterior, requiere de la prudencia indispensable, porque no es ilimitada en un cuadro de balances, pesos y contrapesos. Chávez Frías, como su sucesor, la creyó omnímoda, infinita y, faltando poco, merecidísima al partir de una convicción de sí y del mundo que nos retrotrae a la premodernidad.
Por cierto, jefatura hecha de maniobras, intrigas y revanchas de un bajo instinto para propios y extraños, ofrece suficientes indicios de las amenazas y peligros que conciernen al decidido, honesto e independiente ejercicio de la curul. Jamás se conseguirá a un estadista en tamaño contexto, e – independientemente de la naturaleza y el alcance jurídicos del problema – dibuja igualmente la decrepitud, la pronta e inevitable decrepitud, de un liderazgo sostenido a punta de bayonetas, faltándole el ingreso petrolero que maquille el resto.
Acerándonos moralmente, los parlamentarios de la oposición proseguiremos el camino que decidió el pueblo venezolano el 6-D, esperando su ratificación a través del referendum. No estamos en venta y así lo sabe el jefe de turno, quien sabe de la honestidad, el sacrificio y la persistencia de una dirigencia opositora que, no siendo la mejor del mundo, ofrece un testimonio de lucha imposible de tarifar.
23/08/2016:
http://www.noticiasdevenezuela.org/2016/08/23/del-jefe-que-no-logra-tarifar-a-sus-adversarios-escrito-por-luisbarraganj/
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