... "el dedo en la llaga"....

Cardenal Chá’ejjj
Luis Barragán

Roto de pronto el hastío del acto parlamentario que, por cierto, no decide ni le pertenece ya a la Asamblea Nacional, por muy día de la independencia sea, Chávez Frías arremetió contra el Cardenal Urosa. Pasó instintivamente rápido por el término “comunismo”, para adentrarse envalentonado en los terrenos de la descalificación personal del prelado, exaltando a Monseñor Moronta, quien luego manifestó su solidaridad fraterna con el Arzobispo de Caracas.

De la ráfaga noticiosa de televisión que acuñó la figura presidencial contra al cadetaje espléndidamente formado en la sede de la Academia Militar, tampoco se dio explicación alguna, directa e inequívoca, en torno al propósito denunciado. Simplemente, el comandante-en-jefe aludió al señalamiento de una dictadura marxista y, acaso, en su acostumbrado y limitado lance “teológico”, pidió el perdón de Dios para el atrevido sacerdote.

Jamás ha debatido la naturaleza del régimen que, demasiado evidente, está entregado a los intereses de la dictadura cubana creyendo heredarla con la definitiva desaparición de los Castro, incluyendo todo el arsenal simbólico que ha dado tan estupendos dividendos en medio siglo. Recurrentemente, ensaya un discurso o – mejor – unas frases de concordia y reconciliación, al verse arrinconado, para lanzar con renovados bríos una vasta campaña de containerización o putrefacción de la discusión pública, en la que únicamente destaca por la arbitraria y abusiva ventaja de disponer de todos los recursos del Estado.

Urosa no tiene ocasión alguna para replicarlo ante la novel oficialidad, soportando el continuo, pesado y obsceno aguacero presidencial. He acá, junto a la dócil y vergonzosa conducta de los diputados y afines del universo oficialista, el mejor ejemplo del “debate ideológico” en curso, el cual tiene por soporte las viejas y convencionales consignas que nos retrotraen a etapas que una vez supusimos superadas.

E, insistimos, no tiene oportunidad de replicar suficientemente porque son cada vez menos los medios libres para hacerlo, prohibidos a la familia militar que debe celebrar las largas y consabidas cadenas radiotelevisivas. El poder establecido puede ensañarse y se ensaña arteramente contra el ciudadano que juzgue necesario y conveniente, impidiendo o tratando de impedir toda polémica sobre la putrefacción de los alimentos y el consiguiente establecimiento de las responsabilidades que los diputados, parlamentarios o asambleístas tanto temen, procurando un cupo en la vasta burocracia del chavezato cuando desaparezcan las curules de sus plácidos tormentos.

Todos conocen las posturas de la Conferencia Episcopal Venezolana sobre el marxismo y su proyecto, desde hace décadas. De modo que no puede decirse de un presidente-supremo-cardenalicio sorprendido, cuyos seguidores tampoco ventilan esa documentación., aunque sí confirmamos una conducta de mala fe, manipuladora y maniobrera que tendría una mueca lastimera por respuesta, en el rostro del Marx, Lenin o Trotsky que - ¿hay dudas? – tampoco ha estudiado.

Jefe de Estado, Jefe de Gobierno, Comandante-en-Jefe de la FF.AA, Jefe de la Hacienda Pública Nacional, Jefe de la Diplomacia Venezolana, entre otros reconocimientos, muy bien puede ser el Cardenal - Obispalísimo Chá’ejjj que pase del supercapellanado al arzobispado hasta pedir una mismísima constituyente vaticana. Y quizá sea una ociosa caricaturización, pero estamos frente a alguien que – además – se permite impartir una cátedra ética, haciéndose escuela viviente de la moral y buenas costumbres, siquitrillando la dignidad ajena.

Fuente:
http://www.noticierodigital.com/2010/07/cardenal-cha%E2%80%99ejjj/
http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=671672

Cardenal Urosa según Ernesto Morgado (El Nacional,Caracas,12/07/10)