Tomás Strake
Varios colegas han escrito sobre la dificultad de escribir en las actuales circunstancias. Unos la tienen estando acá, otros ante el reto, a veces aplastante, de sus nuevos países por el mundo. A ellos se le une la emigración con la angustia por las familias que dejaron atrás. Sin duda, escribir hoy es un reto a la disciplina y al coraje. Leyendo unas páginas autobiográficas de Pedro Grases, en las que habla del miedo y la incertidumbre -¡tan parecidos a los nuestros!- que lo abrumaron al inicio de la Guerra Civil, durante la escapatoria y el comienzo de su aventura venezolana; di con este párrafo que a lo mejor nos pueda servir de guía en estos momentos y en los que seguramente vendrán:
«Mi maestro de
criollismo -en lo que a conducta en Venezuela se refiere- el Dr. Luis
Beltrán Guerrero, me ha referido que en una oportunidad le preguntaron a
don Alfonso Reyes, el eximio mexicano fallecido hace poco, cómo había
hecho él para lograr sin interrupciones una tan copiosa y espléndida
obra en México, país donde (como en Venezuela y en los demás de
Hispanoamérica), había sufrido y sobrevivido a tantos cambios y
alborotos. Don Alfonso había replicado: ‘A base de dos principios: 1.
Ser fiel a mí mismo; y 2. No dar cabida al despecho’.»
Fuente:https://www.facebook.com/tomas.straka.9659?hc_ref=ARRmmxfNhVxenhhn_kP2Cv6YnwmV0txFD93Mqbbj5bIBucxd4BJ_qhVGfh4Odd3Mj3I
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