Maduro rendirá hoy cuentas en esperada alocución ante la AN
Ramsés Ulises Siverio
La polémica colmó su presentación del año pasado, cuando Nicolás Maduro, aún con la investidura de vicepresidente, y sin ser nombrado como presidente encargado, presentó la memoria y cuenta del otrora mandatario nacional, Hugo Chávez.
La querella sobre la legalidad de sus actos ocupó la palestra nacional, pero ahora, una vez superados los escollos de la transición, y dejando atrás los cuestionamientos sobre la legitimidad de las elecciones del 14 de abril, Maduro comparece hoy ante la Asamblea Nacional. Lo hace como presidente constitucional de la República, para cumplir con el mandato de la Carta Magna de presentar su memoria y cuenta al Legislativo y el resto del país.
Hoy será la primera presentación formal de este documento por parte de Maduro. Será el balance de un período marcado por la incertidumbre política que imperó a principios de 2013, la muerte de Hugo Chávez, y una inminente elección presidencial que dejó su estampa no solo por la coyuntura que implica el fallecimiento de un jefe de estado, sino por el cuestionamiento de los resultados por casi la mitad de los electores.Con este telón de fondo Maduro asumió su mandato el 19 de abril del año pasado. Así inició un período marcado por la confrontación, el reacomodo de las fuerzas del chavismo y un país que busca respuestas a sus principales necesidades.
El diputado de la Asamblea Nacional por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Luis Barragán, resume el balance de la gestión de Maduro con un dicho popular. Cree que su labor al frente del ejecutivo durante el primer año “ha sido más la bulla que la cabuya”, refiriéndose con esto al divorcio que a su juicio existe entre las palabras y las acciones del autoproclamado “primer presidente chavista”.
Barragán habla de contradicciones cuando Maduro, al inicio de su mandato, hablaba de un “mensaje de paz” entre los venezolanos, pero que en la práctica -señala el parlamentario- no ha hecho más que perseguir a la oposición, negándole espacios de participación y dinamitando, aún más, los puentes para establecer el diálogo entre todos los factores políticos.
Cree que es una “hipocresía” que el Ejecutivo nacional hable de políticas para combatir la inseguridad cuando las cifras de homicidios no dejan de aumentar, cuando los delitos siguen sin recibir castigo, y más aún, cuando se destina menos del 1% del presupuesto nacional para atacar este problema. Por eso afirma que el gobierno “no está en la capacidad de preservar la vida de los ciudadanos”, y no es solo a causa de la inseguridad, sino por la desatención que percibe en otros rubros, como el alimentario.
Inseguridad alimentaria
La caída de la producción alimentaria no es precisamente nueva en la arena nacional. La merma en la actividad agrícola y pecuaria, aunada a la creciente importación de rubros gracias a la renta petrolera es una realidad que ya venía mostrando el último gobierno de Hugo Chávez. Barragán parte de esta premisa y considera que las políticas de Maduro no han apuntado hacia la reactivación de la productividad venezolana. Su mayor argumento: el desabastecimiento.
Si el gobierno de Maduro ha izado una bandera en estos últimos 9 meses ha sido precisamente la de su llamada “lucha contra la corrupción”. Investigaciones, apertura de expedientes, detenciones, imputaciones y hasta la reforma de la Ley Contra la Corrupción vía habilitante ha sido algunos de los hechos que muestran este punto dentro de la agenda del ejecutivo.
Sin embargo, a juicio de Barragán, esta cruzada contra la malversación de recursos públicos no es más que un mecanismo de represión selectiva, muy interesado, y que obedece a dos grandes razones: la necesidad del gobierno de perseguir a la oposición, y las pugnas internas del chavismo.
El diputado por el estado Aragua recuerda que una demostración de transparencia y de democracia en gobiernos anteriores era que la oposición integrara la comisión de contraloría del Poder Legislativo. “¿Por qué no lo hacen ahora?”, se pregunta el parlamentario, quien ve en hechos como ese la intención de un gobierno no muy diáfano en sus cuentas.
Pero no es solo eso. También señala otros casos, como la reforma de la Ley Contra la Corrupción por poderes habilitantes, sin consultar siquiera con la bancada del PSUV; la dilación desde esa misma tribuna para la designación del contralor general de la República, de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, y el mutismo en numerosos casos de corrupción, como el de los deportistas que forjaron documentos para adquirir dólares preferenciales.
“Ahí vemos que esa lucha contra la corrupción no es sincera, porque de ser así debería estar preso medio gobierno”, asevera el diputado, quien señala a la corrupción como uno de los mayores cánceres que afecta la nación.
Un vaso medio lleno
Por su parte, la diputada de la Asamblea Nacional por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Nancy Ascencio, evalúa el primer año de gobierno de Maduro como un período de “mucha carga política”, con unas elecciones presidenciales a cuestas, una tensión política de por medio y un escenario de “acaparamiento y usura” que le endilga a sectores adversos a la “revolución”.
Sostiene que el Ejecutivo debió tomar medidas drásticas para combatir la especulación, las cuales aplaude y comenta que deberían mantenerse para proteger el bolsillo de los venezolanos. Considera que la escasez de productos en la estantería comercial no se debe a una situación de desabastecimiento causada por falta de producción, sino que todo se trata de un acaparamiento orquestado por la oposición, e incluso por parte de un “pueblo inconsciente”, que a su juicio se hace con una cantidad de productos por la incertidumbre de no volver a conseguirlo.
Ascencio reconoce que, efectivamente, se han hecho esfuerzos para combatir la inseguridad a través de planes y programas, pero asume que el número de delitos, incluyendo los homicidios, sigue siendo una asignatura pendiente. “Tenemos muchas fallas y eso hay que reconocerlo. Tenemos que crear más conciencia en las policías, generar más programas de educación para que los muchachos no caigan en la delincuencia, tenemos mucho por hacer”.
Otra de las áreas donde la diputada cree que deben concentrarse más esfuerzos es en el sector salud y en el de la producción alimentaria. Considera que estos tres puntos deben ser la prioridad en el segundo año de Maduro al frente de la Presidencia, pero alega que, si algo hace falta para desarrollar la “revolución”, es tiempo.
- Siempre se ha dicho que la plenitud de este proceso político se alcanzaría en unos cuantos años, y luego de un tiempo este sigue siendo el discurso ante los mismos problemas.- Nosotros no podemos destruir en 15 años todo lo que se hizo en 40. Antes había producto, pero no había quien comprara porque el pueblo no tenía dinero. Tenemos que reconocer que si algo ha habido ahora es dinero y aumento del salario.
- Pero también ha subido la inflación.
- También había fosas de la muerte, y nadie decía nada.
- Pero las cifras de estos años han sido superiores, ¿no?
- Yo no puedo decirlo porque no llevo las estadísticas, pero bastante se ha hecho para combatir la inseguridad, que es un problema social. En lo social es donde más hemos hecho.
Expectación en el hemiciclo
La gestión de Maduro ha sido una sola, pero las visiones sobre su labor la superan en número. El parlamentario de la AN por la MUD, Luis Barragán, no espera mucho de la presentación de esta memoria y cuenta. Estima que será un anecdotario a la usanza de Chávez, una evasión de la realidad que aqueja a los venezolanos, y un vacío de respuestas a los problemas del país.
Ascencio ve esta comparecencia ante el parlamento nacional como un deber establecido en la Constitución. Que el Presidente rendirá cuentas sobre el uso de los fondos otorgados y, según se dice, el anuncio de algunas medidas. Hasta ahora las desconoce.
Solo queda esperar el paso de las horas para ver la presentación de Maduro en la Asamblea. Será la ciudadanía la que juzgue sus memorias, sus cuentas, y sus medidas de gobierno para el 2014. Venezuela espera.
Proceso a Maduro
- Enero: Nicolás Maduro, en calidad de vicepresidente, comparece ante la Asamblea Nacional para presentar la memoria y cuenta del entonces presidente de la República, Nicolás Maduro, ausente de su propia juramentación para el inicio de un nuevo mandato por motivos de salud.
- 5 de marzo: La Asamblea Nacional lo inviste como presidente encargado tras conocerse el fallecimiento de Hugo Chávez.
- 9 de marzo: Una vez formulada la convocatoria del Consejo Nacional Electoral para unas nuevas elecciones presidenciales, se postula como candidato atendiendo a la petición pública de Chávez en su última alocución.
- 14 de abril: Gana las elecciones por poco más de 1% de diferencia contra el candidato de la oposición, Henrique Capriles, quien no reconoció los resultados tildándolos de “fraudulentos”.
- 4 de mayo: Anuncia su llamada “lucha contra la corrupción”, dirigiéndose a sectores tanto del oficialismo como de la oposición.
- 14 de mayo: Se reúne con Empresas Polar para acordar un plan de trabajo para garantizar la producción de alimentos. Era la primera vez en 12 años que un Presidente de la República se reunía con una representación del sector privado del país.
- 13 de junio: Anuncia la detención del presidente de Ferrominera Orinoco, Radwan Sabbagh, por supuestos hechos de corrupción.
- 8 de noviembre: Anuncia medidas contra la especulación en la venta de electrodomésticos en tiendas que habían adquirido dólares preferenciales.
- 18 de diciembre: Se reúne con alcaldes y gobernadores de oposición, a quienes llamó a trabajar en un plan de gobierno conjunto.
http://www.correodelcaroni.com/index.php/politica/item/8264-9-meses-de-gestacion-politica
Nota LB: Larga entrevista telefónica la de ayer, aunque el suscrito habló de la presidencia de la Comisión de Contraloría que no se atreven a entregar a la oposición, como era la vieja costumbre. O del aparato productivo, más que de la productividad.
Supongo que el de la fotografía es Paul Gillman, otra de las estrellas invitadas. Los cadetes estuvieron aún en el mencionado pasillo.
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