David O. Russell construye inteligentemente la historia, aunque esos estafadores tienen por naturaleza y mercado al país en el que funciona, con todas sus imperfecciones, el aparato policial y judicial, mientras en este lado del mundo adquieren otras caracteísticas, además, fuertemente competidos desde el Estado: acá, la estafa no es tal y, allá, aún sobrevive esa importante noción del escándalo. Chequeando los datos (http://es.wikipedia.org/wiki/American_Hustle), quizá necesitaba de mejores actuaciones, pues, excepto, Bradley Cooper y Jennifer Lawrenc, la obra requería algo más que un trabajo de rutina; rubro éste que enfatizó Amy Adams, con un director empecinado en hacerla una vedette. Portal, por cierto, en venta (¿total o parcial?), al que años atrás consultábamos insistentemente (http://www.enlabutaca.com/la-critica-noticias-notas/resenas/2887-escandalo-americano), La Butaca trae la opinión de Rebeca Salas: " "Russell se encarga de demostrarnos eso a través de algunos poderosos diálogos y una fotografía cuyos juegos de luz y ambientación de verdad introducen al espectador a la alocada década de los 70. Esto se enfatiza con un vestuario muy bien armado y una lista de canciones pensada de tal manera que se adecue a la perfección con el desarrollo del filme". Añade que exagera personalidades y situaciones. Sí, tiene buenos diálogos. Y un poco reseña el mundo del FBI.
LB
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