TEÑIDOS

La lengua como castigo del cuerpo
Luis Barragán

Epicentro de sus angustias, dista demasiado el gobierno nacional de domeñar al movimiento estudiantil venezolano. Suele olvidar que lo avala moralmente una larga tradición de luchas en la que, por cierto, el más dramático contraste lo ofrecen aquellos voceros oficiales y oficiosos que - ayer - clamaban a los cielos y – ahora – experimentan el placer morboso de la humillación proferida.

Indagando sobre otros asuntos, hallamos por azar  un largo, libérrimo y elocuente debate en torno a la protesta estudiantil de mayo de 1964, dado en la Cámara de Diputados.   La muerte de un estudiante,   el allanamiento de la universidad, o el hallazgo de armas, naturalmente desembocaba en una polémica que ponía a prueba al gobierno recién electo; confrontando a su vocero, Salom Meza Espinoza, señalaba José Vicente Rangel – por ejemplo – “ya decía que en San Cristóbal son brigadas armadas las que agreden a las manifestaciones estudiantiles (…) prevalidas de la organización partidista y de las ventajas que da estar en el poder”;   afirmaba que “doy la batalla en el Parlamento y en la prensa, y con los hombres que comparto ideas soy partidario de actuar en la calle, a través de las organizaciones políticas” ; o concluía que “no hay cosa peor que pretender detener la historia con la punta de una ametralladora; que pretender paralizar todo el proceso histórico de un país con medidas policiales y represivas” (Diario de Debates, nr. 31 del 27/05/1964).

Medio siglo después, tenemos la criminalización de las pacíficas acciones de calle, la actuación de los delegatarios de un terrorismo que es de Estado y una Asamblea Nacional que se niega a discutir tan abultado problema, en forma obstinada y temeraria. Raro Bicentenario de la Batalla de La Victoria,  desde febrero de 2014, el Foro Penal Venezolano reporta para el momento  de suscribir esta nota,  2867 detenciones (180 menores de edad), 1534 libertades con medidas cautelares (84 menores de edad),  444 por verificar, 399 libertades plenas (48 menores),  171 liberados sin presentación (12 menores), 165 privados de libertad (7 menores), y  154 retenciones (14 menores).

En tres meses, hay 41 muertos y numerosos lesionados de las jornadas cívicas. Y, faltando poco,  existe un grosero monopolio estatal de los medios y una obsesiva censura de los que bregan por su independencia.

Nada casual, semejante a lo que ocurre en el mundo sindical, en el universitario no prospera la presencia del oficialismo y, por ello, también ha pugnado y logrado postergar los comicios en emblemáticas casas de estudios, como la Universidad Central de Venezuela, bajo cualesquiera pretextos jurídicos que esconden el miedo electoral.  Y es que tampoco ha logrado imponer, forzándolos, sendos artefactos políticos como los consejos estudiantiles y de los trabajadores.

No hay dudas, la lengua es el castigo del cuerpo. Y tamaña sentencia popular recae en aquellos que clamaron tanto a los cielos,  procurándonos ahora estos infiernos.

Fuente:
http://www.noticierodigital.com/2014/05/la-lengua-como-castigo-del-cuerpo/
http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=1033834